La nueva edición del programa más desafiante de los que desarrolla POLO positivo llega con fuerza. La aceleradora burgalesa ya ha puesto en marcha la maquinaria para encontrar las soluciones más brillantes capaces de resolver un reto de gestión industrial del consumo energético. El tema de la segunda convocatoria de Desafío Industrial, cuyo periodo de apertura de candidaturas empieza hoy y que cuenta ya con sus bases publicadas, es ‘Gestión inteligente para la mejora del desempeño energético’.
Para este 2021, el programa plantea el siguiente reto: presentar una solución que reduzca la huella de carbono, así como los costes energéticos aplicable al tejido industrial local, nacional e internacional, sobre todo en pymes. El desafío es lanzado por los socios promotores de POLO positivo: Aciturri, Grupo Antolin, Fundación Caja de Burgos, Gonvarri y Pascual.
¿En qué consiste el reto?
Las plantas industriales necesitan una solución sencilla y escalable que les permita ser más eficientes y sostenibles. En base a esto, los participantes tienen que incluir en su propuesta la monitorización de consumos y/o emisiones, el tratamiento de información histórica de los mismos, el uso de la analítica de datos, realización de simulaciones,…, que permitan crear modelos real-visual consistentes y con una fácil instalación (preferiblemente inalámbrica).
Por eso, los sensores, la analítica e inteligencia artificial, los sistemas MES (Manufacturing Execution System) y el empleo de fuentes de energía renovables, serán palancas útiles para conseguir la mejor solución propuesta.
10.000 euros y mentorización para despegar hacia el éxito
El programa está pensado para emprendedores, startups, pymes, estudiantes e investigadores. Los aspirantes tienen de plazo desde el 16 de septiembre y hasta el 20 de octubre de 2021 para presentar propuestas, que se recogerán a través de programas@polopositivo.es. POLO positivo evaluará las candidaturas y elegirá las mejores propuestas. Los seleccionados tendrán que desarrollar un MPV (producto mínimo viable) y defender su idea. El jurado técnico elegirá la ganadora entre el 2 y el 22 de diciembre.
El ganador de este torneo recibirá un premio de 10.000 euros. Además, tendrá la oportunidad de participar en el programa de mentorización para desarrollar su idea y posible piloto.
Los técnicos tendrán en cuenta que las soluciones se presenten bajo estándares de código abierto, que los proyectos sean de bajo coste, la sostenibilidad de los procesos y de las fábricas que los implementen (con foco en la mejora, no en la tecnología en sí), la facilidad de implementación, así como que su disrupción innovadora (alejada de soluciones propietarias, desde el punto de vista legal).
POLO positivo y los Objetivos de Desarrollo Sostenible
Con este nuevo desafío, los socios promotores de la incubadora de empresas burgalesa se comprometen con el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Entre ellos, POLO persigue el acceso a una energía asequible, segura, sostenible y moderna, con metas como duplicar la tasa mundial de mejora de la eficiencia energética.
También es un reto pensado para construir infraestructuras resilientes, promover la industrialización sostenible y fomentar la innovación, además de establecer modalidades de producción y consumo sostenible. A esto se suma que la propuesta ha de estar enfocada a adoptar medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus efectos.
Métrix, ganador del I Desafío Industrial
En la I edición de este reto, bajo el lema ‘Latido Digital’, la empresa Metrix fue la seleccionada para desarrollar su propuesta en Burgos. El proyecto ganador fue el diseño de un sistema de monitorización predictiva para adelantarse a posibles fallos del funcionamiento de maquinaria utilizada en el sector de la aeronáutica. Este sistema se diseñó para Aciturri, uno de los socios promotores de POLO positivo.